Objetivos y señas de identidad de nuestra escuela
La esencia del proyecto educativo
Desde nuestro papel como escuela pública, y respondiendo a los valores y señas de identidad que definen nuestro Proyecto educativo y que detallamos a continuación, perseguimos la consecución de unos objetivos con los cuales no pretendemos alcanzar únicamente los objetivos curriculares estipulados para nuestros alumnos/as, sino también unas metas que potencien el desarrollo integral y competencial de cada uno de nuestros niños y niñas, así como de diferentes sectores de la comunidad educativa.
Dichos objetivos los organizaremos en 3 bloques recogidos en nuestro PEC:
- Objetivos referidos al desarrollo personal
- Objetivos referidos al desarrollo de las interacciones sociales
- Objetivos referidos al desarrollo de los aprendizajes curriculares
Con el objetivo de desarrollar progresivamente las diferentes etapas educativas en nuestro centro, a través de las propuestas pertinentes y adecuadas a las características de cada una de ellas y tomando la normativa vigente de referencia, los objetivos curriculares descritos se contemplarán en los Proyectos Curriculares de cada etapa, prestando especial atención a la coordinación horizontal y vertical para asegurar una graduación ajustada y coherente.
Además, nuestra propuesta para desarrollar este proyecto educativo se construye a partir las siguientes señas de identidad que definen y acompañan todas la decisiones y acciones educativas:
Cada Proyecto Educativo parte de una visión de la Infancia que marcará la identidad del proyecto a través del papel que otorgue al niño/a en su aprendizaje, la relación entre adulto y niño/a y el tipo de propuestas que se llevan a cabo en esa escuela.
Al considerar al niño como un ser activo en su aprendizaje derribamos el modelo tradicional donde el adulto transmite el conocimiento. Partiremos, por tanto, de las vivencias y experiencias del niño (conoc. previos) para realizar propuestas que atiendan a los principios de individualización y socialización del aprendizaje y que se desarrollen a través de la interacción directa con los materiales y con las personas.
Somos una escuela donde se desarrollan propuestas, acciones, interacciones metodológicas que ayudarán a alcanzar los objetivos marcados por el currículo oficial, pero siempre a través de abordar los contenidos de las diferentes áreas, materias y ámbitos desde un enfoque competencial, significativo, útil y real.
Nuestra escuela se convierte en un “laboratorio educativo” en el que los niños y niñas son los protagonistas de sus investigaciones, descubriendo el mundo que les rodea a través de la interacción con el otro, elaborar hipótesis (método científico), teorías y propuestas que le servirán como andamiaje para, desde sus experiencias previas y con la orientación y acompañamiento del adulto, ir construyendo poco a poco, su propio aprendizaje (socioconstructivismo).
Nuestro modelo pedagógico considera necesario entender y atender las necesidades de los alumnos, adaptarse a sus características específicas, en ocasiones muy diferentes a las de generaciones anteriores. Por eso, tratamos de incorporar diferentes herramientas, materiales, propuestas y lenguajes para dar pie a las potencialidades de cada uno de nuestros/as alumnos/as.
Abordamos la diversidad de lenguajes para enriquecer las propuestas y propiciar una mirada global y en conjunto del aprendizaje: artes visuales y plásticas, psicomotricidad, lenguas propias y segundos idiomas, tecnología, música, danza...
Incluimos y subrayamos el uso del lenguaje científico en nuestras propuestas, ya que combina el pensamiento lógico con el crítico y el creativo sin dar prioridad a unos frente a otros, siendo conscientes de la funcionalidad de la expresión oral, la lectura y la escritura como herramientas de aprendizaje y conocimiento.
El primer paso para interconectar todas las partes del ecosistema educativo, está en abrir las puertas del centro al diálogo con las familias y a la mejor comprensión de la realidad de los niños con los que trabajamos.
Al señalar que nos basamos en una idea de cultura de infancia, debemos repensar cual es el lugar que le corresponde al niño/a, pero también hace que redefinamos y atribuyamos adecuadamente el papel que ocupa el adulto: docente, familias y comunidad educativa.
Si partimos desde una perspectiva socioconstructivista del aprendizaje, no puede ser de otro modo que otorguemos a las relaciones con la comunidad educativa un valor esencial para crecer y desarrollar nuestra propuesta educativa.
La relación familia-escuela no solo quiere cumplir una función informativa, sino que queremos invitar a que cree sinergia de participación, opinión, responsabilidad, cultura y educación en el sentido más amplio.
“No sólo las escuelas y familias deben implicarse en la educación de la infancia, sino todos los estamentos, servicios e integrantes de la sociedad.”
Loris Malaguzzi:
En nuestro proyecto educativo, recogemos como parte fundamental, la interacción y colaboración con las asociaciones y entidades sociales y culturales del entorno del barrio de Arcosur y de la ciudad de Zaragoza.
Nuestro centro, como escuela pública tiene como principal objetivo brindar a los niños y niñas oportunidades de encontrar personas y conocimientos, que les permitan experimentar, provocar y generar nuevas experiencias, establecer formas de ser y participar en la vida social para interactuar en juegos, exploraciones, investigaciones…
que les permitan crecer de manera global y desde sus necesidades y experiencias personales.
Un lugar de encuentro y un espacio donde se aprende a conocer y participar en la comunidad como miembro esencial, conociendo y valorando los intereses comunes y la cultura colectiva.
Por eso, creemos que tiene que haber un compromiso desde la escuela hacia la cultura de comunidad y ligada a una identidad propia, acorde a las señas de identidad de nuestro centro, fomentando y participando en las relaciones con la cultura local, con la forma de vida de las personas de su entorno inmediato, con sus diversas manifestaciones culturales, artísticas y educativas propias de la diversidad familiar, social o cultural de las familias y alumnos /as de nuestra escuela.
De la misma manera, desde nuestro centro promoveremos celebraciones y efemérides pensadas para y con los niños y niñas, sin que contengan carácter religioso ni comercial, respetando los espacios y vivencias de nuestras familias y nuestros alumnos/as, que permitan conocer el entorno donde se encuentra ubicado el centro educativo, que favorezca la relación entre familias y escuela, que escucha a los niños en su integralidad y sus condiciones individuales, familiares, etc.
Así mismo, que respeten también las diferentes composiciones familiares, las culturas presentes en nuestro centro, las tradiciones del folklore de la localidad, así como los juegos y manifestaciones culturales, el arte y la cultura como Patrimonio Inmaterial, desarrollo de un aprendizaje íntegro y global del niño, respetando la específica cultura de la infancia que definen la Convención sobre los Derechos del Niño y las Observaciones Generales de su Comité.